EUROPA
PRESS
29 junio
2021
Cosméticos,
qué pueden hacer y qué no por tu piel
Un cosmético es toda sustancia o mezcla
destinada a ser puesta en contacto con las partes superficiales del cuerpo
humano o con los dientes y las mucosas bucales, con el fin exclusivo o
principal de limpiarlos, perfumarlos, modificar su aspecto, protegerlos,
mantenerlos en buen estado, o corregir los olores corporales.
Así define lo que es un cosmético la normativa europea de
2009, actualmente en vigor, y recoge el doctorado en Química y Ciencia de
materiales y posgrado en cosmética y dermofarmacia, Raquel Marcos Esteban, en
'Belleza con Ciencia. Lo que nadie te cuenta sobre tus cosméticos' (Planeta).
Esta especialista en productos sanitarios lo resume en una
entrevista con Infosalus como "todo aquello que
se aplica sobre la piel, cremas, esmaltes uñas, dentífricos, productos para
cabello, por ejemplo", si bien reconoce que el problema es que uno puede equivocarse
debido a su presentación y pensar que el producto que tenemos en las manos es
un cosmético, cuando realmente puede tratarse de un medicamento, si bien el
aspecto del envase es similar.
"Por ello, un producto destinado a tratar la celulitis
no podría catalogarse como 'cosmético', puesto que, al desarrollarse en un
tejido subcutáneo, la hipodermis, no sería alcanzable en términos legales por
un cosmético", matiza la experta.
Marcos Esteban resalta que sucede lo mismo con productos
cosméticos que ayudan en el crecimiento del cabello, "algo que hoy solo se
consigue por vía tópica a través de medicamentos como
el minoxidil, tratamiento frente a piojos, que es un biocida, ya que ayuda a la
exterminación de plagas, o una pomada antiinflamatoria, que se consideraría
medicamento, pues influye en el metabolismo". A su juicio, es importante
identificar su uso y la función real de un cosmético para que, como usuarios,
"sepamos gestionar nuestras expectativas".
Entonces, ¿qué puede y qué no puede hacer por tu piel un
cosmético? El posgrado en cosmética y dermofarmacia dice que pueden ayudar a
que se vea mejor a nivel estético la piel, ya que principalmente actúan sobre
la epidermis, la capa superficial de la piel. "Acondiciona la piel y la
protege frente agresiones externas (contaminación, ambiental)", por
ejemplo.
En cuanto a si son seguros hoy en día, esta experta en
productos sanitarios asegura que sí, dado que la UE cuenta con una de las
legislaciones "más estrictas" en la materia. "El fabricante está
obligado a realizar determinados estudios previa puesta en el mercado del
producto y tiene datos de la materia prima y del producto terminado. Una vez en
el mercado, se realiza un seguimiento a estos productos a través del sistema de
vigilancia que se notifica a la Agencia Española de Medicamentos y Productos
Sanitarios (AEMPS)", subraya.
¿Se prueban en animales?
Una de las dudas más frecuentes que nos pueden surgir en
cuanto a los cosméticos es si se testan en animales, antes de salir al mercado.
Raquel Marcos indica en este sentido que en Europa está prohibida la
experimentación en animales desde 2013, y no se puede testar un cosmético ni en
la materia prima, ni tampoco en el producto terminado. Eso sí, reconoce que sí
que hay marcas que quieren entrar en otros países como Asia, donde en ocasiones
la experimentación animal es obligatoria, aunque son productos diferentes a los
comercializados en Europa.
Por otro lado, Marcos Esteban subraya que uno de los
productos cosméticos estrella son las emulsiones, las cremas hidratantes:
"La hidratación es uno de los objetivos a lograr para tener una piel sana
y por tanto, dar con la crema es clave. No existen fórmulas mágicas para
encontrarla, pero sí algunas ideas que puedan ayudarte en la búsqueda. La crema
será aquella que tenga un equilibro de ingredientes humectantes, emolientes y
oclusivos, que en sinergia mejore la función barrera. Que funcione o no
dependerá del estado de la piel".
¿Qué pasa con la cosmética que hoy se llama vegana?
En última instancia, la experta en productos sanitarios
explica en qué consiste la cosmética vegana, cada vez más de moda. Según
refiere, la cosmética a nivel general en su gran mayoría es sintética, de
origen vegetal, y quedan muy pocos ingredientes de origen animal, como el
famoso pigmento de la cochinilla, o el colágeno, que se usa cada vez menos,
habiendo pocos ingredientes ya hoy en los cosméticos de origen animal.
En el caso de la cosmética vegana, hecha a partir de
ingredientes vegetales, dice que no quieren usar por ejemplo la cera alba por
perjudicar a las abejas. "Saludables son todos los productos cosméticos,
sean veganos o no. Es algo que no le haga daño a la piel y eso es independiente
del origen del ingrediente, depende de la fórmula y del tipo de piel, no tiene
nada que ver", agrega.
Raquel Marcos remarca además sobre el tema de ingredientes
naturales, que aparece en muchas etiquetas, que en cosmética natural esto es un
término abstracto, "ya que nadie usa fruta para producirlos", y
aunque ponga que son naturales los ingredientes pasan por procesos químicos.
"Los productos de origen natural son aquellos con menos
procesos químicos o físico químicos. ¿Si son mejores o peores?, realmente la
cosmética natural sí es más sostenible a nivel medioambiental, pero no está
fundamentado porque los elementos sintéticos son más sostenibles que su análogo
natural", afirma. Con ello, reconoce que, pese a que vendan los productos
veganos como una "cosmética vegana y natural", no hay que olvidar,
según precisa, que el 70% de la fórmula es agua.